El presente texto sostiene que, como un cuerpo normativo y económico-político aparentemente progresista, el liberalismo ha jugado un rol históricamente reactivo o reaccionario al oponerse de manera permanente a los diseños institucionales promovidos por los movimientos democratizadores de carácter republicano o igualitario. Descansando sobre las diferencias entre el pensamiento republicano – democrático y el pensamiento liberal, el artículo resalta la importancia de rescatar elementos histórico – políticos republicanos de origen clásico, los cuales han sido permanentemente opacados y subsumidos por la retórica liberal hegemónica, y cuyo más claro ejemplo lo podemos encontrar en el diseño institucional neoliberal actual. Para exponer el argumento planteado, revisamos el debate liberalismo, neo republicanismo, republicanismo democrático, y sus respectivas concepciones sobre la libertad, para después intentar asociar -desde el punto de vista del republicanismo democrático- pensamiento conservador y oligárquico con el diseño institucional liberal; y, sobre todo, con su versión contemporánea: el neoliberalismo. Finalmente, a partir del ejemplo chileno, damos cuenta de cómo estas dos tradiciones se hacen evidentes en los preceptos jurídicos y normativos que articulan las constituciones chilenas de los años 1925 y 1980.